Las cinco cosas que tienes que tener en cuenta para elegir el nombre de tu bebé

 

Disney Landia Rodríguez, Efrofriendlyns Jhesvergreen, Batman Bin Suparman, Jesucristo Hitler Paracelso… no, no se me ha estropeado el teclado, lo que acabáis de leer son nombres reales que conforman la lista de nombres más raros del mundo y que podéis leer completa aquí.

Leyendo estas joyas nominativas seguramente pensaréis, ¿a quién se lo ocurre ponerle este nombre a un bebé? ¿Qué padre coge a su recién nacido en brazos y lo mira, tan pequeño entre sus manos y le dice «te llamarás Efrofriendlyns Jhesvergreen«? Parece sacado de una película de comedia, pero no, estas cosas pasan y siguen sucediendo. ¿No había nadie cerca de la pobre Efro, que alertara a los padres de todo lo que iba a vivir esta niña, gracias a su nombre?

Y ya fuera de bromas, ponerle el nombre a un hijo es un tema de mucha responsabilidad, es una decisión que no debemos tomar a la ligera. Por eso, te traigo estas cinco claves a tener en cuenta para elegir el nombre del bebé

 

  1. Investiga el significado: no llamarías a tu hijo «el tonto», «el feo», ¿a qué no? entonces, ¿por qué no hacer una labor de investigación un poquito más profunda y revisas el significado del nombre que estás pensando? A lo mejor te llevas una sorpresa y ese nombre que querías, que es tan bonito, resulta que es la forma griega o latina de decir una palabra que no te gusta tanto. O puede que esté asociado con algún concepto religioso que no te agrada. Pues eso, investiga el significado y que el nombre esté alineado a tus principios. Hay muchísimas webs donde puedes buscarlo.
  2. Los nombres influyen en la personalidad: y de esto estoy convencida. Tal como llames a tu hijo, pues eso va a influir en su forma de ser. Si es un nombre con mucho carácter, eso va a producir en él/ella. Mi nombre (Tatiana) significa «la que es activa» y honestamente, los que me conocen pueden dar fe de que sí refleja mi personalidad.
  3. En cuanto a las herencias: esto es un tema muy personal, pero particularmente, yo opto por la originalidad. Cuando vemos que el abuelo se llama Juan, el padre se llama Juan y el niño ha de llamarse Juan (con el perdón de todos los Juanes que no tengo nada en vuestra contra jeje), el niño tiene muchísimas posibilidades de sentirse cargado con la mochila de patrones y conductas de los otros dos Juanes… «como mi abuelo/padre hacía/decía». Cada niño es único y como tal, debe ser llamado. Debemos reforzarles su identidad y hacerles ver que son únicos y excepcionales.
  4. Usa nombres que sean fáciles de escribir y pronunciar: ten en cuenta que ahora tu hijo está en casa, irá a la Escuela Infantil y al colegio y tú harás sus gestiones. Pero tarde o temprano tendrá vida social, tendrá un trabajo y muchos papeles que hacer. Por favor, piensa en ella/él. Piensa en todos los formularios que tendrá que corregir si la gente de alrededor se equivoca rellenando su nombre.
  5. La decisión es completamente vuestra (de los padres): y aquí debéis dejar de lado lo que piensan los abuelos, los tíos y las cuñadas. Cada uno tiene gustos particulares, pero definitivamente los primeros que tenéis que estar a gusto sois vosotros los papis.

Escoger el nombre no es una tarea sencilla y menos sabiendo la responsabilidad que conlleva. Si tú que estás leyendo tienes un nombre que no te gusta, o has puesto un nombre a tu hijo que no te gusta el significado, no te desanimes, al revés, tienes todo por delante para que con tu personalidad y carisma, desmontar los mitos y hacer de ese nombre, una marca propia 😉

¿Qué piensas de la elección de los nombres? ¿Has conocido a alguien con un nombre raro? Recuerda que seguimos viéndonos en mi Instagram @TatiLuis

 

 

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