8 cosas que callamos los padres

Por prudencia, buen hacer o educación, hay padres y madres que aún callamos muchas cosas ante situaciones o personas que muchas veces nos ponen al límite. Luego, cuando estamos en la intimidad de nuestro hogar o en el monólogo interno de nuestra cabeza, se nos ocurre muchas formas en las que pudimos haber respondido, pero ya es demasiado tarde. Pero nunca nos atrevemos a decirlo a la cara. Eso ahora va a cambiar, porque aquí te descubrirás esos ocho pensamientos que nos carcomen a los que tenemos hijos. Podrás compartirlo en tus redes sociales luego para que te quedes bien a gusto. Vamos al lío.

  1. Estamos muy cansados para hacer planes: sí. Casi siempre preferimos descansar, pero aún así vamos a la comida, merienda, cena cuando sabemos que luego vamos a estar reventados. Todo sea por compartir.
  2. Nos sentimos juzgados permanentemente: padres, madres, abuelos, tíos, suegros, cuñados… hay opinólogos de oficio que se han sacado la carrera y las oposiciones entera. Son expertos en criar a tu hijo mejor que tú. Y TE LO HACEN SABER.
  3. Nos sentimos excluidos por los amigos que no tienen hijos: sí. Esto es así. Parece que ya tener hijos te convierte en un ser que es incapaz de tener conversaciones más allá de pañales y cacas. Noticia: seguimos siendo gente interesante y divertida.
  4. Vivimos en constante escrutinio de los otros padres del colegio: esto merece un post aparte. Pero, ¿qué clase de mundo estamos creando? Por favor, esto es aguantar más presión que una olla express.
  5. Nos molesta que etiqueten a nuestros hijos: ayyyyyyy, qué inquieto es tu niño! ¡no para quieto! ¡qué tímido! ¡qué moreno! ¡qué rubio! ¡qué llorica! SEÑOR/SEÑORA. Por favor.
  6. Quisiéramos que salir de un grupo de Whatsapp del colegio no sea un pecado capital: ¿qué tal si empezamos un movimiento en redes sociales para decirle adiós a los grupos?
  7. No nos gusta que nos miren como bichos raros si…: si dormimos con nuestros hijos, si damos lactancia prolongada, si no les pegamos, si les involucramos en la familia en vez de mandarles como militares.
  8. Quisiéramos que la gente entienda que no podemos contestar al Whatsapp o las llamadas al instante: especialmente si tenemos hijos pequeños. Normalmente nuestros ojos, manos y atención están puestos en mantener a los niños con vida. No podemos distraernos jaja.
  9. En realidad, muy en el fondo, disfrutamos de los dibujos animados: en nuestro caso no hay que rascar demasiado. Nos encanta Toy Story, Pj Mask, Story Bots… y vamos en bucle. Sé de más de uno que se sabe las canciones al derecho y al revés.

¿Y tú? ¡Cuéntame qué callas! Recuerda que puedes encontrarme en Instagram como TatiLuis, nos vemos allí 😉

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